Armonía en el Domo de Cobre…

por: Alejandra Balam y Bernardo Ameneyro
Fotos | OCESA | Liliana Estrada.
Acompañado del crew de Homegrown Mafia Entertainment, bailarinas, bailarines, MC’s, Dj, pirotecnia y demás talento con una excelente actitud y un elaborado plan de producción, ejecutado de manera milimétrica, el rapero mexicano Erick Raúl Alemán Ramírez, conocido como Alemán, ofreció un concierto en el Palacio de los Deportes harto emocional y sentido, un lugar seguro donde se convivió con niños, muchos niños, tanto arriba como abajo del escenario, provocando escenas que suponemos, serán inolvidables en los menores que bailaron arriba de los hombros de Papá o en el piso del venue que se cimbró en más de dos ocasiones por la extraordinaria respuesta del público respetable.
Fiel a su estilo entrón, el rapero y compositor originario de Los Cabos, Baja California Sur, no se esperó a que los temas fueran conectando de a poco con su fiel legión de seguidores, a quienes les agradeció de manera muy sentida en cada oportunidad que tuvo arriba del escenario; su actitud frontal que acostumbra provocar al respetable ya sea con la mirada o con su lírica, se mostró con la misma actitud que provocó su último álbum titulado “Huracán”, aparentemente intempestivo, pero es todo lo contrario.
Noche de colaboraciones e invitados, todos mañosos, muy chingones, Alan Blaze, mano derecha del originario de Cabo San Loco, como él le dice, Dr. Zupreeme y Muelas de Gallo, Alan Blaze, el Jesse Baez, Akasha, Elote el Bárbaro, Adán Cruz , Junior H y hasta Ximena Sariñana, quienes prendieron fuego al escenario con la extraoridnaria y coordinada actitud de las y los bailarines arriba del escenario.
De ahí que sea considerado como un referente del rap y hip hop mexicano, la evidencia del trabajo es innegable, la preparación o como se dice en este pedo, “las tablas” arriba del escenario, lo ubican en otra categoría, lejos muy lejos de los que se hacen los guapos, haciéndose los rudos y al mismo tiempo no sudan ni madres arriba del escenario.
El respeto por la música, la lírica y principalmente por el público, Erick se rompe el hocico arriba del escenario porque sabe que todo lo aparentemente sacrificado y todo lo aparentemente perdido lo pusieron la noche de anoche en una de las marquesinas (ahora digitales) más emocionantes e importantes de su carrera.
Evidencia de lo anterior esque no se conformó con las herramientas tradicionales del género, sino que abrió la puerta para convivir con sonidos como el Trap, Rap, R&B Funk, y hasta música urbana.







