Música regia para bailar.
por: Bernardo Ameneyro Esquivel
twitter: @nayoameneyro
El pasado sábado 27 de abril las bandas regiomontanas 60 Tigres y Quiero Club se presentaron en el Lunario del Auditorio Nacional para presentar el nuevo disco “El Techo es el Suelo” que Marcela Viejo, Prsicilla González, Boscop Benavente y Luis “Fara” andan presumiendo por todos lados por lo que decidieron darse gusto en una presentación especial, realizando un recorrido musical de sus 9 años de carrera, aterrizado en 3 producciones y 1 EP.
Y llego la hora, los encargados de darle la bienvenida al respetable que se dio cita en el foro de Reforma fueron los locos de 60 Tigres que conectaron de inmediato con el público gracias a su energética propuesta con temas conocidos y nuevo material de su más reciente producción “Animal” llena de beats poderosos donde fusionan sonidos de punk, funk, ritmos latinos y algo de psicodelia; obvio la respuesta por parte de los que nos encontrábamos debajo de las tarimas fue de baile inmediato.
El set list elegido para la noche fue el siguiente: “Arma Secreta”, “Animal”, “Dentro”, “Esquemas”, “Indestructible”, “Modelos”, “Picoso”, “24 horas” y “Cáncer”.
Poco después se pudo ver en la obscuridad la imagen de Marcela y una Prsicilla encapuchada, escoltadas por sus amigochos de toda la vida Boscop y Luis que apenas dieron la indicación y se pusieron a brincar por todo el escenario, contagiando a sus seguidores que reconocieron de volada los acordes de “no hay nadie” que desde que la descargamos hace unos días ya suponíamos como una especie de intro que presumiera del punch característico de su electro rock inconfundible.
La segunda rola elegida para su set list fue “Cuerpo”, donde la tesitura de Marcela y Priscilla en las voces fueron destacables que sumado a la actitud fiestera del siempre sonriente Luis y el energético Boscop y el juego de luces provocaron en el respetable los primeros gritos de euforia acompañados por movimientos corporales propios de la chamacada.
Toco el turno para la rola que puso nombre al disco “El Techo es el Suelo”, podemos decir que sin salirse del sonido que habitualmente reconocemos como el sonido de la banda, si hay una evolución en el actuar (ejecución) de cada uno de sus integrantes, Boscop es un maestro y en mi parecer es la base de la estructura de la banda, Luis es el que más se divierte, provoca y no teme mirar a los ojos a su público, Marcela es la energética de la banda, brinca, grita, canta y no se cansa y Priscilla nos habla más a través de su guitarra que de las propias voces que acompaña a la melodía de las canciones que interpretan.
Todo es fiesta arriba del escenario, se nota que siguen en el misma sintonía de hace años, no se estorban ni se complican la vida, saben como provocar a su público y disfrutan mucho verlos cantar y bailar los temas que han dejado sembrados a lo largo de casi 10 años de vida como banda, mismos que ahora han surtido frutos que pueden empezar cosechar.
El cuarto tema elegido para la noche fue “Música”, obligado por donde lo vean y en lo personal el que más disfruté de la noche que fue cortada abruptamente por la guardia de seguridad que celosa de su deber nos dijo a los que portábamos pulsera amarilla que no podíamos quedarnos a ver el resto del concierto…. De haber sabido mela quito… OBVIO les dejamos video…
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Lástima, me faltaron mis favoritas que esperaba disfrutar para contarles cómo terminó la pachanga, obvio son cosas que no podemos controlar y seguramente tampoco esperar que cambien en la manera de “hacer logística” a los que se encargan de organizar conciertos, que obvio nada tienen que ver con el lugar o con la banda misma.
Por lo poco que vimos podemos decir que estuvo con madre y aunque corto fue un placer.
Enhorabuena
