Lo intemporal y perenne.
Por: Bernardo Ameneyro Esquivel
Twitter: @nayoameneyro
El día de ayer, jueves 23 de mayo, se llevó a cabo la tercer noche de Rock en el Blanca, que después de dos fechas exitosas, volvió a abrir las puertas del Teatro Blanquita para la tercera fecha con un cartel de un par de bandas de rock harto consentidas por la raza: Liquits y Fobia.
Con un retraso leve, cosa que agradecemos ya que transitar por esta ciudad con lluvia es cosa complicada, los responsables de 5 producciones discográficas a lo largo de 20 años de carrera, Liquits subieron al escenario para presentar un set list biográfico con temas conocidos y otros de más reciente manufactura.
Asi, los otrora estudiantes de la Academia de Música Fermatta Ro (guitarra/voz), Edi (bajo/voz) y Teo (batería) saludaron al respetable que poco a poco llegaba corriendo al foro ubicado en la colonia centro con “Chido” y “La vida es corta”.
El tema “Ven Ven”, misma a la que debe el nombre su última producción, fue bien recibida por el público pero en mi humilde opinión hubieran invitado a las chicas del video, ya ni la friegan envidiosos…
Con el tema “Baila baila”, el respetable hizo lo propio que al compás de los trombones, dando paso a rolas como “Sola”, “ Jardín” y “Llorale güey” donde conectaron por completo con el público que se paró de sus butacas.
“¿Quien eres?”, “Piropo”, dedicada a todas las chuladas que se dieron cita en el Blanquita, “Cuando apagues la luz” y “Vino tu sangre” fueron el preámbulo para la pachequísima “Chícharos mágicos”.
Cuando interpretaron el tema “Extrañar”, volvieron a salir los trombones, bautizados como La Mafia Cubana… tiene un ritmo cadencioso con una base de reggae muy sabroso que nos demuestra que el amor es circular…
Uno de mis temas favoritos de la banda: “Desde que” que con casi 10 años de existencia, sigue renovándose cada vez que tengo la fortuna de escucharla en vivo. Ya para despedirse, la divertidísima rola del “Oso Carpintero” que se hizo presente con todo y bacha donde recordaron a los de Café Tacvba con un popurri donde incluyeron el tema “Chilanga Banda”.
Muy divertido su rock pop psicodélico empeyotado… neta felicidades.
A eso de las 10: 30 la banda de rock capitalina con 9 discos bajo el brazo (6 de Estudio, 2 en vivo y 1 recopilación), integrada por Leonardo de Lozanne, Paco Huidobro, Federico Fong y Mauricio Claveria, inciaron su participación con los temas: “Dos corazones”, “La Búsqueda” y “Siempre Estoy” que escuchamos por primera vez en el último de los conciertos de Fobiarama.
Con “Todas las estrellas” el sonido nos dio una buena idea de lo poderoso y tronado que estaría el sonido a lo largo de la noche, de vuelta al Destruye Hogares; la rola “Vampiros” y “Monstruo” siguieron por la misma línea ponchada, la verdad que se escucho muy bien, en especial la potencia vocal de Leonardo.
Y de nuevo a los temas clásicos: “Descontrol” y “200 sábados” fueron de nuevo flashbacks que sirvieron como contexto para dar cuenta del camino recorrido por la banda que lo ha vivido prácticamente todo y a propósito de los contextos, con “Dinosaurios”, se solicitó al respetable cooperar con alzando sus celulares para el momento cursi de la noche.
La intemporalidad del recital nos volvió a transportar al pasado con “Hipnotízame” fue la primera con la que la banda conecto por completo, todos la coreaban, es la vieja escuela escuincles, sigue rifando.. Obvio le siguió “Vivo”, entrañable por donde la quieran ver.
Continuando con los temas clásicos,“Hoy tengo miedo”, “No eres yo” y “El Diablo”, provocaron al grado de que el maestro Huidobro, hablara con el público a través de su instrumento, se les acerca y le celebran todo, es la interacción que estuvimos esperando durante todo el concierto, es el mejor momento de la noche.
Después del clásico entretiempo o como dicen mis amigas freskis el encore, salieron para tocar otros tres temas obligados:”Veneno Vil”, “Revolución” y “El Microbito” cerrando con harta energía y dejando muy contento al respetable que hizo una pequeña pausa en su semana para darse un gustito de esos que valen la pena.
Enhora buena estuvo muy chingón.