El florecimiento del festival de música electrónica…
#EDCMéxico
por: Alejandra MI AMOR Balam y Bernardo Ameneyro.
FOTOS: Cortesía OCESA | Lulú Urdapilleta – Liliana Estrada – José Jorge Carreón – César Vicuña.
Se llevó a cabo la novena edición de Electric Daisy Carnival (EDC) México, catalogada como el carnaval más grande en la historia, con más de 200 actos En Vivo con una de las experiencias más innovadoras y envolventes del Mundo, logrando albergar 300 mil almas el pasado fin de semana, los días 24, 25 y 26 de febrero en el Autódromo Hermanos Rodríguez que albergó una fiesta por momentos sui géneris, llena de creatividad, color que permitió florecer, bajo el cielo eléctrico y celebrar la vida durante tres días de baile.
Tres días de baile se dicen rápido, pero requieren del despliegue físico obvio, jornadas de caminatas largas, estadías a pie, también considerables y brincos, muchos brincos que permitían entrar en calor y hacer lucir los outfits y/o atuendos que permitieron desfilar dinosaurios, súper héroes, unicornios, pandas, hadas, muchas hadas multicolores que hicieron lo propio con el aporte de energía, basada en la cultura PLUR, lograron consolidar la comunidad amorosa, a través de la música.
Así, con un clima extraordinario que permitió lucir outfits que lograron ensalzar no solo la belleza física de los llamados headliners, sino de explorar, durante tres días, personalidades mágicas, juguetonas, coloridas bellas, muy bellas todas, capaces de dar color a una ciudad luminosa, grata, divertida.
A través de un espectáculo multisensorial, los seis escenarios: kineticFIELD, circuitGROUNDS, DOS EQUIS Stage, wasteLAND, neonGARDEN y stereoBLOOM, recibieron decenas de miles de almas inconformes, que se niegan a habituarse lo que un algoritmo o un quesque medio especializado les indica lo que está cool, chido o bailable, la temática no fue diferente a la de otros años, pero sí muy variada e inquisitiva por su cualidad versatil.
Subgéneros de música electrónica como el techno, hardstyle, bass, house, trance, EDM y ritmos latinos, fueron explorados de manera diligente, milimétrica, obsesiva por el clic que marcó el tiempo y el acelere o calma del pulso de miles de corazones que reconocieron las múltiples velocidades de un metrónomo imaginario que marcaba las emociones por la medida internacional de beats por minuto (BPM), que gracias al espectáculo multisensorial que también incluyó fuegos artificiales, juegos mecánicos, comida de todo tipo y demás actividades, ofreció un fin de semana muy completo en emociones; sin duda toda una experiencia.
En nuestro caso, la decisión del itinerario fue un salto al vacío, nada mejor que dejarse soprender justo a la “hora pico” de un viernes en Ciudad de México para entrar en un oasis que logró aislarnos de una locura de tránsito y feos modos por la incapacidad logística de quienes “diseñan” la movilidad de nuestra hermosa ciudad que durante el último fin de semana de febrero, ofreció un camino diferente para escapar de la ahogosa rutina.
En sentido contrario a las manecillas del reloj, encontramos un camino derrotero en una marea hermosa de miles de almas (arriba de los 90 mil por día, tenemos entendido), que nos llenaron de datos y bellas postales en actos como el de MARIANA BO, BRESH, CHARLOTTE DE WITTE, MARSHMELLO, MARTIN GARRIX y nuestro favorito por mucho: SIDE PIECE que eligió un set ideal para despedir al señor Sol, en medio de un despliegue tecnológico de producción, impresionante.
En la segunda jornada, la más concurrida por el aforo de headliners que seguían llegando al Autódromo Hermanos Rodríguez, pasadas las 10 de la noche cuando el escenario principal estaba a reventar, aplicamos la misma, caminar en círculos para visitar todos los escenarios y atender las recomendaciones de los más duchos en estos menesteres.
La propuesta sonora y visual por parte de los DJ’s y productores como ADAM BEYER, ARTBAT, DEORRO, HANA, R3HAB, JESSICA AUDIFFRED, SUSSIE 4, ZOMBIES IN MIAMI y por supuesto TIËSTO, fue inmejorable, como en fiesta casera, las opciones y cambios de ritmos a parentemente drásticos, nos hicieron disfrutar de una tarde donde pudimos entrarle nuevamente al perreo, bailar sets mañosos que incluyeron temas harto posicionados en el gusto del público respetable, pasando por música disco, pop, alguito de rock, cumbia, alguito de regional mexicano y claro los ritmos especializados como el house, el techno y el trance.
Para el tercer día, con el caballo notablemente cansado pero con la certidumbre que valía toda la maldita pena, cada paso y amenaza de calambre en las pantorrillas, nos dispusimos a cerrar con broche de oro nuestro fin de semana largo con una fuerte dosis de baile, a destacar, sin duda ,los actos nacionales de Esa Mi Pau en el escenario DOS EQUIS Stage, y nuestros adorados de Los Wookies en el circuitGROUNDS, que luego de cinco años de no haberse presnetado en el festival, ofrecieron un set harto sabroso y bailable, siendo uno de los mejores actos o sets del día, el dúo orgullosamente mexicano, conformado por Hugo Díaz Barreiro (Calacas) y Andre Fernández (Andre VII), ofrecieron una cátedra de cómo conectar con el respetable en una hora harto emocional que nos llevó de a poquis, pero con paso firme con temas de la leyenda Barry White y lograrlas conectar con colaboraciones hechas con Su Majestad Imperial, Silverio, mostrando el eslabón perfecto del soido dosmilero que encontraba fórmulas sonoras con sonidos y propuestas de sonidos de diferentes décadas. Baste con decir que fue el único set de los tres días que vimos de principio a fin… Pinches tan chingones que por cierto se quitaron las máscaras a mitad del set, detalle que fue muy apreciado por el público.
Todavía con clima espectacular, decidimos guardar energía para el cierre en el escenario principal por lo que ya no nos alejamos tanto, a destacar los actos de AMBROZ, ERIC PRYDZ, GALANTIS, ILLENIUM, TALE OF US, TOM & COLLINS, NICKY ROMERO y ELDERBROOK.
Más consolidado que nunca, el EDC México, demostró nuevamente que la evolución es parte esencial del posicionamiento de la marca que en su décima edición seguro traerá cosas que se grabaran en el hipotálamo y que hoy lunes son parte del imaginario de los verdaderos protagonistas de la triple jornada: los headliners.
